Plátano canario | Biota - Cultivando tu salud
True
Imagen del producto

Plátano canario

3,40 € 3,40 € kg 3.4 EUR

3,27 €

La imagen puede no coincidir exactamente con el producto, ni en el tamaño ni en las unidades mostradas.

Plátano canario

Días
Horas
Mins
Secs
2

3,40 € 3,40 € kg 3.4 EUR

3,27 €

    Esta combinación no existe.

    Agregar al carrito

    Su origen reside en el sur del continente asiático, conociéndose ya en el año 650 d.C en el Mediterráneo.

    En el s.XV llego a las Islas Canarias donde empezó a cultivarse de forma comercial y su mayor auge llegó a finales del s.XIX siendo a la fecha, uno de los mayores productores en España y diversas zonas de Europa.

    Destaca hoy día su producción en el sudeste de Asia, junto con otras producciones de plátano provenientes de América Central y del Sur y de las zonas tropicales de África.

    Pertenece a la familia de las Musáceas, al igual que la banana, y sus variedades más conocidas son el plátano de Canarias o el plátano macho.

    Es una fruta que podemos encontrarla en el mercado durante todo el año. Presenta una forma alargada (aunque de menor tamaño que la banana) y curva, con una piel lisa y gruesa en tonalidades amarillas, encontrando en su mejor punto de maduración con la presencia de unas motitas marrones. Es una fruta fácil de pelar y de transportar, y tiene un peso medio, entre 100 y 200 gramos, de ahí que recurramos a ella cuando vamos a realizar excursiones o como merienda para los más pequeños. Su interior tiene una pulpa suave y carnosa, con unas tonalidades amarillo suave y un sabor dulce muy característico.

    A la hora de comprarlos, elegiremos aquellos ejemplares que tenga la piel lisa y firme al tacto, sin golpes ni grietas, que tengan una coloración amarillenta pero no excesiva y descartaremos aquellos plátanos que estén excesivamente blandos u oscurecidos. Cuanto más amarillo - marrón se encuentre, mayor cantidad de azúcares y dulzor presentará, ya que al ser una fruta climatérica, va a ir desprendiendo sus almidones en forma de azúcares conforme vaya madurando.

    En casa, podemos dejarlo madurar en un ambiente seco y fresco protegido de la luz o bien meterlo en el frigorífico si queremos retrasar su maduración. En el caso de introducirlo en el frigorífico, la piel se va a ennegrecer, pero esto no va a afectar a la calidad del fruto. Podemos reducir este factor envolviendo los plátanos en un papel de periódico.

    Una forma de aprovechar aquellos plátanos que hayan madurado demasiado y de evitar el desperdicio de alimentos, es meterlos en el congelador y utilizarlos como base para hacer helados. Para ello pelaremos el plátano y lo cortaremos en rodajas y una vez introducido en un táper lo congelaremos. Luego bastaría con sacarlo un par de minutos antes de consumirlo y mezclarlo en la batidora con cacao o especias así como con otra fruta fresca o congelada y un poco de leche o bebida vegetal.

    To install this Web App in your iPhone/iPad press and then Add to Home Screen.